Me tuve que alejar
del mundo y empezar a soñar con los pies colgando de cualquier luna. Esta
realidad que nos ata a nuestro entorno, que nos amenaza con un mal invisible
que mata antes de morir, hizo de mí un hombre recluido en las cuatro paredes de
su pensamiento y de un hogar dulce hogar que ahora es más refugio que dulce por
las circunstancias que vivimos en el planeta.
Cifras, cifras y
más cifras de infectados, muertos y salvados se agolpaban en la mente de un
tipo como yo que siempre fue más de letras que de ciencias. Y de tanto sumar tristezas,
restar alegrías, multiplicar soledades y dividir esperanzas, opté por detenerme
y pensar:
¿Quién soy? ¿Quién
quiero ser? ¿A quién me gustaría parecerme? ¿Dónde se bajó aquel que pisaba
charcos y saboreaba piruletas de colores?
Aquel, era el niño
que llevo dentro y que atemorizado, llevaba tiempo escondido bajo siete mantas
de incertidumbres y malos augurios.
El niño que
escribía con tinta roja llena de latidos, pasó a ser el adulto adusto de mirada
triste y alegrías enjauladas. Me dije entonces: NO, NO y mil veces NO.
Por mí y por todos
mis compañeros, voy a dejar de jugar a ser un adulto de hoy para ser el niño de
ayer.
Con esa intención
inauguro hoy este rinconcito en el que coleccionaré estrellas brillantes de
sentidos pensamientos. Ojalá todos sean alegres con bandas sonoras de esperanza
y buenos deseos. Pero alguien dijo una vez que para que una estrella brille, es
necesaria también la oscuridad. Quiera Dios, el destino o Peter Pan que no me
envuelvan los tonos negros con sabor a duelo y pueda transmitir con mis letras
un sentimiento, una media sonrisa o una lágrima de esas que de vez en cuando
también los niños saben llorar como nadie en este y en todos los mundos.
Seas quien seas,
te conozca o no, me entiendas o me dejes de entender, te doy la bienvenida a mi
universo de estrellas con los pies colgando.
*Como banda sonora de inauguración sin otra razón que ser la primera canción que me vino a la mente, aquí os dejo un pedazo de tema de unos artistas que fueron y serán siempre grandes estrellas.
*Como banda sonora de inauguración sin otra razón que ser la primera canción que me vino a la mente, aquí os dejo un pedazo de tema de unos artistas que fueron y serán siempre grandes estrellas.
Me encanto leerte. Feliz Jueves santo y bendiciones.
ResponderEliminar¡Bienvenido a mi blog!Gracias por seguirme. Yo también quiero jugar a dejar de ser la adulta de hoy para convertirme en la niña de ayer. Así que me quedo contigo para ver esas estrellas que van a ir apareciendo. Me alegro de conocerte.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias y bienvenida.
ResponderEliminarUn saludo
Muchas gracias a ti Rita por seguir este pequeño rincón de mi nuevo universo. Yo también me alegro mucho porque ya nos conocemos de un viejo Café del Swing del que eras buena clienta.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Oiga señor de la mochila ¿dónde puedo tomar un café en las estrellas?, bueno, robaré una de color azul y la llevaré en el bolsillo cuando entre en tu nuevo espacio.
ResponderEliminarYo también soy más de letras que de ciencias, de hecho hice letras puras y luego me lancé al mundo de la medicina sin pensar la que me esperaba en bioquímica. Pero no me arrepiento, aquellos tiempos me han dado muchas satisfacciones y ahora estoy orgullosa de mi gente luchadora por cumplir el juramento de Hipócrates lo mejor que se puede.
Espero que en esta nueva aventura te vaya muy bien. Tu forma de escribir es cercana y a veces llega al corazón.
Wellcome, Luismi.
Aquí mismo querida amiga te invitaré a todos los cafés que quieras y veremos el mundo sin cristales de por medio. Tu gente que se está partiendo el alma, están presentes en todos los firmamentos de las mejores estrellas. Vuelan alto y serán los héroes de un mundo que ya no volverá a ser igual.
ResponderEliminarBienvenida a este pedacito de universo y muchas gracias.